Este método de abastecimiento reduce costos y optimiza la producción a través de un esquema de gran agilidad y precisión. El trabajo del Grupo Mirgor con una automotriz.
Un desafío clave para las empresas que busquen desarrollarse y ser sostenibles económicamente es lograr una utilización eficiente de sus recursos para reducir costos. En ese marco, el manejo y distribución de las mercaderías juega un papel fundamental, con diferentes ramas que apuntan a cumplir distintos objetivos. Por ejemplo, la logística inversa sirve para reutilizar y reciclar materiales, aunque también para estrechar la comunicación con los clientes. La logística Just in Time, por su parte, brinda ventajas que generan un efecto derrame al interior de la compañía.
La finalidad principal de la logística Just in Time es conseguir más beneficios a un menor costo mediante la optimización de los procesos productivos. ¿Cómo se logra este cometido? Manteniendo los inventarios al mínimo nivel posible a partir de una estrategia de trabajo con proveedores que entregan justo lo necesario en el momento adecuado.
Este método fue creado en la década de 1980 por Toyota, cuya fabricación de algunas de sus autopartes en Argentina está a cargo del Grupo Mirgor, que también tiene una firma especializada en logística, Mirlog, para brindar servicios de almacenamiento y distribución.
Las ventajas del método Just in Time
La logística Just in Time permite eliminar stocks para llevar a cabo un proceso productivo más eficaz, responder de forma más rápida a los pedidos de los clientes y bajar costos. Además, ofrece flexibilidad para adaptarse en cantidad y variedad a las fluctuaciones diarias y mensuales de la demanda, y, al trabajar con volúmenes mínimos de mercadería, da la posibilidad de verificar que las unidades que pasarán a la siguiente etapa del proceso se encuentran en buen estado.
De este modo, se suprime la necesidad de guardar productos, un factor que repercute directamente sobre el precio final al arribar al punto de venta. También se reducen las chances de que se produzcan pérdidas por razones de antigüedad, caducidad o por disminución del valor de los suministros mientras estaban almacenados.
Entre las ventajas más interesantes de la logística Just in Time sobresale la cercanía en el trabajo con los proveedores. Este vínculo estrecho con los partners redunda en facilidades para acordar compras aseguradas a lo largo del año, lo cual permite obtener precios más convenientes. No obstante, este beneficio podría quedar neutralizado si se adquieren bajos volúmenes de productos.
A su vez, este tipo de logística requiere trabajadores polivalentes, capaces de manejar cualquier maquinaria. Es decir, empuja a las empresas a contar con personal muy capacitado.
La logística Just in Time requiere de una enorme precisión en los tiempos de entrega. Si por ejemplo una terminal automotriz trabaja con este esquema en la recepción de autopartes, cualquier demora afectará directamente los tiempos de producción. Por eso es esencial regular y controlar los flujos al interior del sistema.
La experiencia en logística Just in Time del Grupo Mirgor
A través de Mirlog, su empresa dedicada a la logística, el Grupo Mirgor ofrece este servicio a su cartera de clientes. Uno de los casos de éxito que consigna es la alianza que tiene con Volkswagen, que recibe autopartes para abastecer a su línea de producción en la planta de General Pacheco con el esquema Just in Time.
Así, cada tres minutos Volkswagen le manda a Mirlog una orden de envío para que llegue justo a tiempo el equipo necesario para la línea de montaje. Y cada una hora, un camión con los pedidos realizados sale con las autopartes requeridas por la terminal.
El Grupo Mirgor está a la vanguardia en logística. Con un centro propio de 12.000 metros cuadrados en la localidad bonaerense de Garín, Mirlog se encarga de la recepción, ingreso, almacenamiento, control de stock, picking y packing de los productos de múltiples empresas del país.